Trabajos del Centro

Sobre la Ley de Karma

¿Que sabemos sobre esta Ley?

 

Al parecer, muchos estudiantes de Teosofía se encuentran en un callejón sin salida al querer explicar algo sobre la Ley de Karma, probablemente este inconveniente surja de la falta de estudio como por la falta de una comprensión más cabal de este entuertoso tema.

H. P. Blabatsky, declaró que “…porque si bien ignoramos lo que Karma es per se y lo que es su esencia, sabemos cómo opera y podemos definir y describir su modo de acción con exactitud. Solo ignoramos su causa última, precisamente como la filosofía moderna, que admite que la causa última de las cosas es incognoscible.” (La Clave de Teosofía)1

Quizá esto explique la imposibilidad de dar una explicación certera y definitiva de lo que es Karma. Esta Ley, según dice el Mahatma M. es Atma, y de Atma también sabemos muy poco, no son cosas tangibles desde el punto de vista Humano, pero sin embargo, vemos como la manifestación de esta ley tiene un poder tremendo en el universo como en la vida Humana o de cualquier pequeña vida que vibre en el plano físico.

Karma es asociado al dolor y las mil y una miserias humanas, el concepto general es que imparte castigo, como que no reconoce piedad alguna al ejecutar la sentencia sobre cualquier acto en que haya sido violentada la armonía, y raras veces se suele mencionar “el buen Karma”, que de hecho solo puede haberlo, si han habido buenas acciones (esto último está referido sólo al nivel humano).

Es importante destacar la enseñanza que nos da la Teosofía, Karma no es ni bueno ni malo, solo reproduce fielmente la reacción que ha producido una determinada acción, y si es posible ver o sufrir esas consecuencias pareciendo que se nos ha agregado más sufrimiento adicional, es porque no tenemos en cuenta que la “carga adicional” es debida al poder del pensamiento que hemos impreso en la acción.

La ignorancia Humana pretende creer que es posible evitar su justicia, pero aunque el infractor huya a la velocidad fantástica de la luz, o implore protección a Ángeles o Dioses, Karma siempre estará en frente de él. Un hombre comete un crimen y cree que suicidándose, pagará la culpa o podrá evitar que la Ley humana lo alcance. Quizá de esta última ley pueda escapar, pero de Karma jamás, y lo que es peor, pagará por los dos crímenes cometidos, el de su víctima y sobre su propio crimen. ¿En qué momento o en qué tiempo le hará cumplir su sentencia el Karma? Tal vez en otra vida o por secuencias en varias de ellas, pero no evadirá la Ley hasta que la última gota de ese error haya sido agotada.

Pero, Karma ¿es en verdad el gran verdugo Universal, creado (¿creado en cada manifestación universal o nunca ha tenido principio ni fin y es activo aun en el reposo universal?) solo para castigar sin piedad a todo aquello que desarmonice en el mundo material y humano y en el mismo Universo? Tal vez sea necesario tratar de entender mejor esto, para luego comprender y así incorporar el conocimiento en nuestro íntimo ser.

Si decimos que hay una Armonía Universal, debemos suponer que todo acto que provoque desarmonía, deberá ser corregido para mantener esa Armonía viviente en perfecto equilibrio, ¿qué es lo que provoca desarmonía en el reino Humano? Hoy sabemos por la Teosofía que ha divulgado este conocimiento, de manera más universal que, la mayor causa que provoca la reacción de un Karma negativo, según nuestra apreciación, son los actos basados en la ignorancia, esta madre de todos los males, es la más prolífica gestadora de errores en la conducta humana. El conocimiento de las funciones de la Ley de Karma, puede modificar nuestra conducta errónea originada por la ignorancia, y comenzar a armonizar con la reacción niveladora de Karma. Cuando sabemos cómo opera la Ley de perfección ¿a qué violentar con acciones incorrectas a esta Ley? La ley moral de todos los tiempos, aplicada en antiguas escuelas de Sabiduría nos dice de ella misma, que su conformación es esencialmente el fruto de las acciones correctas. Una manera de asociarnos con ella debería ser un cambio real y profundo en la conducta observando con el mayor sentido común, de no caer en extremos que puedan formar conductas estructuradas y que inevitablemente quedemos presos dentro de ellas y generen ¡¡otro tipo de Karma!!

Muchos de los efectos Kármicos, que afligen a la mayor parte de la raza humana, son el resultado de acciones colectivas de familias, barrios, pueblos, ciudades, naciones o globales, este Karma colectivo es el que más afecta en masa a toda la Humanidad, y es por eso que somos afectados también en lo individual porque somos parte de esa masa Humana. Pero si cada ser Humano genera un campo de pensamiento y de acciones correctas donde quiera que esté, poblará el campo mental colectivo, de esa fuerza espiritual, ahuyentando las tenebrosas masas de pensamientos cargadas de egoísmos y de las más infestas intenciones salidas de las mentes corrompidas de seres Humanos que ven en la materia su única realidad, la cual debe ser vivida como el último día de vida para “gozar y ser felices”.

Nos podemos preguntar, ¿en qué dirección va nuestra Humanidad? podemos deducir que tiene a cuenta un futuro casi totalmente hipotecado por un Karma que al restablecer el Orden, producirá tanto dolor en esta Humanidad, proporcionalmente al daño causado en el sistema. Entonces, al parecer, nuestra Humanidad, no ha ido en la dirección correcta, a pesar de los líderes espirituales que aparecieron en el mundo, dejando tras de sí, las normas de conducta que consiguen con su práctica la liberación de tanto sufrimiento inútil. Todas las enseñanzas liberadoras en muchos casos, cayeron en las manos de sacerdocios organizados, y la otrora Religión Universal de Sabiduría, se fue corrompiendo a medida que se subdividía por la ambición y el poder. Entonces, el dogma apareció para crucificar las enseñanzas y condicionarlas dentro de un infinito mar de supersticiones que esclavizan con sus creencias, a las sociedades más pobres y humildes. Pero en todos los tiempos hubo Hombres Sabios que supieron salvaguardar el cúmulo de Sabiduría heredada de otras grandes evoluciones de otros sistemas. Protegidos por el silencio y el misterio, estos Hombres Sagrados son los guardianes y servidores de todo el desarrollo humano dentro de este planeta, produciendo en cada ciclo Kármico una benefactora influencia en la mente de toda esta Humanidad para impulsar su evolución espiritual. En cada Ciclo Kármico, elegido por ellos, hace su aparición en el mundo uno de sus integrantes, para ajustar y reformar los desvíos del conocimiento Espiritual, que son ocasionados por el hombre que ha tomado al mundo físico como su única realidad, sin darse cuenta que esta asociación con esta irrealidad Mayávica lo puede perder en una incesante rueda de reencarnaciones, cuando no, desintegrado por el enorme peso kármico de sus propias malas acciones. Ellos han revelado que en toda religión se encuentra parte de esta Sabiduría Divina, por cierto, oculta tras el velo de las supersticiones que han terminado siendo tomadas como verdades y como Ley. Pero un día llegará en que todas las religiones deberán retornar a su origen y fuente Universal, conformándose en una única vía Espiritual para conducir al Hombre al sagrado templo interno de su propio Ser, pues no tendrán las religiones más que aceptar los hechos de sus desvíos y redimirse por la fuerza de las evidencias, ante la fuente de Sabiduría que una vez, por la ambición y el poder abandonaron, y ese hecho ha tenido un costo Kármico demasiado elevado en dolor y sufrimientos indecibles, causado por el fanatismo religioso, el mayor crimen gestado por la superstición y la ignorancia humana.

Quien entienda y luego comprenda la ley de Karma, jamás creerá en milagros, y mucho menos en la santidad de ningún sacerdote de ninguna religión y muy difícilmente caerá en la trampa de estas imposiciones religiosas, y esa es su primera gran libertad; ya no estará más condicionado por el miedo a un dios flagelador y reaccionario ante la negativa de rendirle tributo con su adoración. Ser libres y poner esa libertad en manos del esclarecimiento mental e intelectual más elevado, poder reconocernos como entidades libres para educir nuestro futuro espiritual, en armonía con esa Ley que lejos de someternos, una vez que vamos comprendiendo su funcionamiento y a la vez cómo debemos funcionar dentro del esquema de evolución, colabora para que cada mérito logrado por nuestro esfuerzo sea un impulso más hacia la Libertad Mayor, Nirvana.

Es necesario comprender que Karma rara vez responde de manera lineal, Karma aparece en todos los sucesos de nuestra vida cuando ha reunido una cantidad de causas, produciendo una síntesis con todas ellas y un resultado determinado, por ello es que es tan difícil saber porque los sucesos de nuestra vida nos afectan de tal o cual manera y podemos suponer que somos “castigados” por alguna voluntad divina por alguna razón que desconocemos. Pues no, si algo perturba nuestra vida con dolor de cualquier tipo de sufrimiento, es solo el resumen Kármico de nuestras acciones que nos son retribuidas por la reacción de esta Ley, ya sea el resultado por errores cometidos en esta vida o en otras existencias anteriores, cuyas acumulaciones han encontrado en esta existencia la oportunidad de manifestarse. “Cuando el Cáliz Kármico se ha llenado hasta su límite, éste se derrama inevitablemente sobre quien lo llenó”.

H. P. Blavatsky dice en La Doctrina Secreta, “El Kosmos entero es guiado, controlado y animado por una serie casi infinita de Jerarquías de Seres conscientes, cada uno tienen una misión que ejecutar y que, les demos un nombre u otro, llamándoles Dhyan-Chohans o Ángeles, son “mensajeros” solo en el sentido de que son los agentes de las Leyes Kármica y Cósmica”2. Es en estas declaraciones de esta maestra de la Teosofía en que debemos detenernos un momento para asimilar la idea de lo que nos está diciendo, “…una serie casi infinita de Jerarquías de Seres conscientes…son los agentes de las Leyes Kármicas y Cósmica…” Vale decir, que Karma es una Ley que es constantemente impulsada por estas súper-inteligencias, manteniendo una constante vigilancia en el orden y el equilibrio en la manifestación de este poder Armonioso en todos los principios o planos y por lo consiguiente afectando a todos los seres o vidas existentes en esos planos o principios. Estas Jerarquías, llamadas también Jerarquías Angélicas, son convocadas por personas que pretenden tener “contacto” con ellas. Cabría preguntarse, si estas personas conocen de la enorme dificultad que implica contactarse con estas Jerarquías, las mismas están compuestas por hombres que han alcanzado ese estado, en manifestaciones quién sabe en qué antiquísimos períodos de tiempos pasados, o en universos anteriores al presente; y muchos otros son futuros hombres que aún no han pasado por la evolución física o sea, no han encarnado; una vez llegados a ser Seres Humanos podrán reconquistar esos reinos desde donde son originarios pero, en un nuevo estado de conciencia ganado por esfuerzos realizados en el plano material, reino de Maya (productora de ilusión). Lo tocante a este tema está relacionado a la falsa idea de que es posible usar de mediador a un “Ángel” o “Deva” o algún “Santo humano” y poder a través de ellos evitar los efectos Kármicos originados por acciones incorrectas. No es solo el arrepentimiento, el que puede pretender abogar ante esta ley de justicia, en todo caso el arrepentimiento debe ser el compromiso incorruptible para no volver a hacer aquello que no se debe hacer. Si debemos aprender de nuestros errores, no debemos desaprovechar la vida para resolver la mayor cantidad de ideas equivocadas que pululan en nuestra mente y provocan solo sufrimiento a nuestro alrededor, creando así más Karma y no necesariamente el más conveniente. Pretender entregar a seres divinos nuestros errores para ser “salvados” de las consecuencias es ignorar los poderes de esta ley que tarde o temprano se hará presente en nuestra vida y pedirá la restitución del equilibrio alterado; todo Karma que es generado por nuestras acciones, solo puede ser resuelto por nosotros mismos, tanto el que es generado desde nuestra mente, como aquel que llevamos a la realización en el plano físico.

Entonces, vemos la imposibilidad de cualquier interacción con esos planos a los cuales solo podríamos acceder con una vida de pureza Espiritual inmaculada que solo se puede lograr con una profunda dedicación que llevara años o aún más, vidas. Es necesario alcanzar la nota tónica de cada principio espiritual, para que el Dyan-Cohan de ese principio, nos dé vía libre porque lo hemos conquistado por esa suprema pureza lograda por la renuncia a toda tentación del plano fenomenal. Agregamos que, siendo que ellos son los administradores de Karma, sería en todo caso imposible la complicidad con ellos, en ocultar un error cometido por la inconducta humana. Estos Reinos están muy lejos de ser alcanzados por personas con mentes llenas de supersticiones. Esto último, debe ser la primera asepsia mental que deberá hacer quien pretenda incursionar por tan elevadas esferas espirituales, pues median entre este plano y los planos donde ellos residen, un sin fin de años de evolución. Debemos poder ser conscientes en esos planos, lo cual implica lograr tal pureza de vida espiritual necesaria para acceder y actuar dentro de esos supremos estados de conciencia de cada uno de esos planos y ningún Deva, o Dhyan Chohans querrá implicarse con los errores del plano más bajo de la materia y sus habitantes, ellos, solo expresan la ley de armonía infinita, o sea a Karma. ¿Cómo puede creer alguien que puede conectarse con seres tan elevados y hacerlos cómplices de sus fechorías y errores o para que curen sus enfermedades como también sus frustraciones, todo eso tal vez como resultados Kármicos? Esto es necedad e ignorancia, solo el ser humano crea leyes que pueden ser corrompidas, y es por eso que cree, en su ingenuidad, que es posible hacer, a través de su religión, que un ser de esa naturaleza cumpla con sus deseos o lo libere del peso Kármico contraído por sus desvíos.

Tal vez sea necesario advertir que en las invocaciones hechas a los Devas o Ángeles, los únicos que es posible que respondan, son los elementales, los cuales suelen tomar la apariencia de aquello que está en la imaginación del convocante.

El Karma no es una cuestión de creencia ciega o una fe aún más ciega, no comulga esta ley con ninguna superstición, si alguien empleara la superstición para producir temor y lograr algún egoísta beneficio con ello, lejos estará en todo caso de su comprensión y su justicia. El estudio y la investigación sobre Karma es para el investigador, que busca el crecimiento espiritual de la Humanidad, en una constante observación de su manifestación, su reflexión deberá crear nuevos “surcos mentales” más apropiados para lograr una asociación plena con esta ley. Esto provocará que la Naturaleza le abra las puertas de sus Sagrados recintos para comprender cómo, desde la inmensidad del Kosmos, pasando por el reino Humano, hasta llegar a los micro mundos de infinitas vidas, todo se encuentra cobijado por el poder impulsor de esta ley única. Son esos Hombres, los que se asocian a ella y se hacen así mismos esa misma ley, que una vez que han logrado su perfección, deja de ser Karma para ellos, o sea que se ha logrado esa divina transmutación en la que esta ley perfecta es Dharma. El Hombre Espiritualmente realizado vive en Dharma, el hombre que no ha alcanzado ese estado Espiritual vive y sufre bajo el imperio correctivo de Karma.

Para poder entender y luego comprender nuestra existencia en este Universo, es necesario saber que todos los que formamos parte de él, estamos aquí porque esa incognoscible ley de Karma llama al sueño a esa Divina Unidad, y comienza un Súper Ciclo de existencia que abarca todo el todo o sea lo que llamamos Kosmos, es en este escenario infinito donde toda la actividad comienza con un nombre, Evolución. Un mar de vida se expande por todos los principios espirituales hasta que esa oleada de vida, se materializa en el Mayávico Universo, donde la ley de Karma opera a través de leyes que aún desconocemos y otras ya son conocidas por nuestra actual civilización y su ciencia. La actividad de Karma en el universo opera de manera distinta que en el ser humano, es en este último en que es el agente corrector ético y moral de la conducta humana, y en el Universo es el balance de las energías más poderosas e inimaginables que mantiene en perfecta armonía los sistemas galácticos con sus miríadas de soles y planetas donde la vida se desarrolla impulsada por esa ley de necesidad, hacia su éxito o hacia su fracaso. Los unos que van superando los obstáculos de la evolución giran en una espiral ascendente ciclo tras ciclo, pero los que van perdiendo impulso y se convierten en un fracaso, su espiral va en agónico descenso y finalmente se desintegran arrebatados por los ígneos poderes de la ley, Karma.

Bajo el poder de la llamada “Ley de Necesidad” descendemos a los campos de la evolución, Imperio de Karma con sus eternos Ciclos e inter-ciclos, que de manera ascendente, van marcando los grados de evolución y de progreso de miríadas de vidas. Toda individualidad trae consigo el primer Skandha que lo anclará a la materia, la Ignorancia. Este es el punto de partida en el campo de la evolución de toda vida física, la Ley de Necesidad encuentra en ella el motivo principal para hacernos ingresar al río de la evolución, llamado Samsara, donde somos arrastrados por las corrientes de las reencarnaciones tantas veces como sea necesario, hasta que “nos demos cuenta” que podemos erguirnos y caminar por nuestra cuenta, manteniendo el equilibrado discernimiento que nos permitirá llegar a “la otra Orilla” tras penosos esfuerzos. Haciendo uso de la imaginación planteo así parte del proceso de evolución. Salir de este Río de Samsara será todo un supremo esfuerzo que deberemos hacer en cada existencia, para lo cual será necesario estudiar a profundidad los vehículos de Karma, llamados Skandhas, que generamos sin control debido a nuestra ignorancia. Es el descontrol que existe en nuestra Mente-Kámica, el que nos lleva de continuo a crear apegos a esos mismos Skandhas en un círculo vicioso y enfermizo. El egoísmo instintivo que provocan esos Skandhas dan como resultado una feroz “lucha por la existencia” que nos va corrompiendo de tal manera que toda nuestra vida está basada en una competencia encarnizada, por llegar a ninguna parte. Es en esa “lucha por la existencia” de la cual habla El Mahachohan en su carta del año 1891, donde perdemos toda moralidad, y hacemos pedazos la ética de la conducta. Los “crímenes mentales" terminan materializándose, trayendo más dolor y miseria a la vida humana y por consiguiente más Karma desfavorable.

Esto nos pone a la cabeza en este sistema, de ser los seres que más generamos Karma de todo tipo, y sus resultados, son la cárcel de otra reencarnación: nacimiento, niñez, adolescencia, madurez, vejez, enfermedad y nuevamente la muerte. Luego de un relativo descanso en Devachán, surgimos a la vida terrestre otra vez, atraídos por el poder mismo de Karma y todo ese ejército de Skandhas. La creación inconsciente de esos ejércitos de Skandhas, son un polo de atracción a la materia, si hay Skandhas, hay Karma.

El Karma es atraído por toda cosa que vibre y se mueva, produciendo con ello causas, pero los resultados o efectos, son administrados por esta Ley, que inevitablemente impulsará esos resultados en forma espiral, hacia arriba o hacia abajo según sea la acción primaria, positiva o negativa, alcanzando al productor de esas causas ya sea en esta vida o en otras ya que como antes explicamos Karma no es lineal. Pero es en el Hombre, que esa espiral puede descender peligrosamente si no despierta el interés Moral de corregirse. Karma y su Ley de Ciclos son los que provocan nuevos impulsos, creando las modificaciones necesarias en que todo ser viviente y los sistemas en los que vive, en cada culminación de cada uno de ellos, va potenciando la evolución siempre hacia delante por el poder renovador y vivificante como también selectivo de los Ciclos. Según el progreso obtenido por cada individualidad, le da los derechos Kármicos para incluirse en el siguiente Ciclo, pero es en este difícil “paso”, en que muchas Almas quedan rezagadas e imposibilitadas de “pasar” a causa de sus desvíos y pierden esta nueva oportunidad, el peso de ese Karma nocivo las arrastra al fondo de ese viejo y oscuro ciclo, donde su destino generalmente es previsible pero, no es bueno ni oportuno mencionarlo aquí.

Tenemos entonces, algunas facetas de esta incognoscible Ley, que ya podemos ir observando. La importancia de conocer sobre la Ley de Karma, debe producir en el estudiante una modificación genuina de su conducta. Es entonces donde comienza a librarse la más cruenta batalla en nuestros sentidos, entre lo que quiere y lo que no quiere y en lo que debe hacer; todos nuestros contenidos abogan por defender cada una de nuestras acciones, calificándolas como buenas, ¿son buenas en realidad? entonces, ¿por qué estamos aquí? y es quizás, la respuesta que surge, si somos veraces, que no es casualidad nuestra existencia aún aquí, entonces, es causalidad. Así queda demostrado que la Ley no se equivoca, es en su lienzo Cósmico donde ha quedado grabado por los Lipikas, cada gesto y cada pensamiento y cada acción, que ha llevado a determinados resultados que son los que propician nuestro retorno al mundo con todo lo que existir en él, implica.

Por eso, es tan importante que nuestra actividad en la vida diaria esté siempre sustentada en las buenas acciones y en los correctos pensamientos, estos últimos una vez formados por la intensidad del odio o del amor, acometerán en contra o a favor de aquello que odiemos o amemos, pero sea cual fuere la causa que lo genere, siempre y sin excepción producirá Karma, que siempre retorna con el mismo impulso con el que fue generado, de manera que la acumulación positiva o negativa de esas formas de pensamiento pesará lo suficiente como para que, el que pese más, decida el futuro Karma a ser vivido en la siguiente encarnación, por ello si nos observamos con más detenimiento podemos conocer gran parte de nuestra existencia futura, “Si quieres saber cómo será tu vida futura observa tu comportamiento en la presente”.

El Karma Mental que producimos con la cantidad de intenciones buenas y no tan buenas, como las acciones que terminamos llevando a cabo por la inspiración de esos mismos pensamientos, nos suelen intensificar el resentimiento, odio y venganza como a la vez un intenso egoísmo, porque generalmente somos más proclives a los pensamientos poco correctos, y de allí esos resultados que nunca imaginamos que son entidades vivas y que suelen dibujar el futuro Kármico en el secreto silencio del mundo Mental que, por no saberse mucho sobre él, no deja de guardar cada acción y gesto como intención, que Karma recopila para ponerlos a la hora de la muerte en la balanza de las decisiones futuras.

Detrás de cada una de las Leyes manifestadas en todos los Principios o Planos, existe una inteligencia Suprema que la gobierna. Esas Inteligencias hacen posible que cada una de estas Leyes se mantenga con el mayor grado de pureza y perfección en constante actividad impulsando en su septenaria fuerza, el lado de la naturaleza que le toque, en el Plan Divino o de Evolución.

Todo el equilibrio de esas potentes leyes dinámicas dependen de Karma, e inter-vienen en todo el desarrollo de la manifestación Kósmica, siendo impulsadas en cada Ciclo Kármico, por esas inteligencias Chohánicas, que en cuyo Plan llevan hacia la perfección a todos los componentes de cada manifestación, sean de matriz atómica subatómica o superatómica, etc.

La actual Ciencia puede ver y comprobar, los efectos últimos de estas fuerzas que se revisten de poder en el plano físico, y verán los sistemas Solares con sus respectivos planetas y estos con sus lunas, como también infinita cantidad de galaxias que junto con la nuestra, mantienen un orden cíclico en sus respectivas órbitas, el cual comienza a ser descubierto por la inteligencia Humana, desconcertándola por la precisión de sus exactas revoluciones. Hoy, nuestros científicos conocen bastante de estos hechos, aunque, como antes se dijo, no han alcanzado aún, ver las fuerzas verdaderas que producen los llamados últimos efectos, o resultados, y durante siglos han visto la periodicidad cíclica de muchos efectos Cósmicos, como el efecto que se da de continuo en todo el universo, en que todo gira de manera espiral, sobre un centro determinado. Cada Galaxia genera por sí misma ese poder dinámico para que cada uno de sus sistemas solares alimenten determinada cantidad de planetas con sus respectivas vidas, ya sean estas visibles o invisibles a la visión Humana, pero detrás de ese imponderable poder, se esconde a nuestras aún pobres percepciones, las dos potencias que logran este balance Kósmico, llamada por la ciencia humana, ley de gravedad. En realidad, son todo un conjunto de energías que producen un potente campo electromagnético, en oposición a la fuerza inducida desde la inteligencia que gobierna cada planeta, como a cada Sol. Son los Soles, los centro de actividad principal y sostenedor de las vidas internas y externas de cada uno de esos planetas que lo rodean, en giros y elípticas producidas por la dinámica de todo ese conjunto llamado sistema planetario o solar. Todos en un eterno movimiento rotatorio, donde la Fuerza interna se proyecta como el poder en la materia, imbuida por esa Ley de gravedad, modelando las esféricas formas de cada globo. Siempre que hay movimiento, en cualquier rincón del Universo, hay algún tipo de vida, visible o no. Si estas vidas ya tienen acceso al principio mental generarán seguramente causas, con sus correspondientes efectos, y esto hace posible que Karma intervenga dependiendo del grado de evolución que en esa esfera se desarrolle; lógicamente que existen variantes inimaginables para nosotros, pero sí que operará en el orden moral y ético en esas individualidades, porque obtenido el principio Mental se hacen moralmente responsables de cada acción generando el Karma correspondiente, como lo hace en la actual raza Humana de este sistema, como también en el equilibrio planetario y de orden que dará lugar al tipo de vida sensiente que posiblemente se desarrolle allí.

Las Galaxias y sus giros, contienen en sí mismas una cantidad inmensa de planetas y soles y cada una es una flor de la creación, que junto con la infinita cantidad de ellas, forman el jardín más bello y fantástico de la evolución. Toda esta espléndida visión, es el escenario donde el llamado drama de la vida se desarrolla, y a la vez, todo el Universo, junto a sus miríadas de galaxias, viaja en una dantesca espiral, expandiéndose en ese mar de vida al cual llamamos Kosmos, bajo la vigilante y protectora Ley de Armonía llamada Karma. Es esta Ley la que abre la puerta de un nuevo proyecto Kósmico, ayuda en todo su desarrollo, evalúa el mérito y el demérito de las acciones de los entes inteligentes en todo el Universo, es Karma, que hace el último balance evolutivo de cada Kalpa Universal, llevando los resultados a esa misteriosa Unidad de Vida y finalmente, cierra la puerta hasta el próximo desarrollo Kósmico, mientras vigila el reposo silencioso de toda actividad de esa Unidad insondable que ha despertado a su Realidad, hasta que hace sonar la hora para entrar al nuevo sueño Kósmico, entonces, la Unidad, nuevamente entra en la diversidad, para comenzar una vez más la actividad con sus eternos procesos en una espiral siempre ascendente, donde cada individualidad va transmutando su ignorancia, en Sabiduría, y comienza a reconocerse como una Divinidad integral de ESA Unidad infinita, única y permanente, así como desconocida…

Por Manuel Fernández

Agosto del 2014

 

 


1- Pág. 185 en la edición de Kier del 2007, pág. 201 1ra edición en inglés.

2- Tomo I pag. 274 de la 1ra edición en inglés.

Acerca de los Mahatmas

 

Desde que H. P. Blavatsky hace pública su relación con los Adeptos de los Himalayas, se ha especulado sobre si existen estos avanzados Sabios, o si son simplemente creaciones del vulgo, sujetas a tradiciones o a simples supersticiones; por lo cual H. P. Blavatsky fue víctima de varios ataques por parte de muchos personajes importantes de esa época, otros afirmados en sus tradiciones, como los Brahmanes, nunca estuvieron de acuerdo en que ella revelara tanta información que había estado siempre oculta para gran parte del Occidente y mucho menos que se hablara de los Mahatmas, considerados por muchos como Hombres Santos. Un muro de silencio, resguardó por siglos su verdadera existencia. Pero, H.P.B, y la difusión de la Teosofía, pusieron sobre el tapete de toda la Humanidad, la existencia de estos grandes Seres, hasta aparecieron sus nombres, que después se supo no eran los verdaderos dado que ellos preservan sus nombres celosamente y solo son revelados a sus Chelas más adelantados y confiables.

El Sr. Sinnett, director de un Diario en la India, forma un vínculo extraordinario con ellos, a través de H.P.B. y comienza a mantener una regular interacción epistolar, en la cual recibe una gran cantidad de enseñanzas ya que el Sr. Sinnett, pidió ser chela de estos Maestros, y con ello puso en movimiento una rueda Kármica que ha llegado a nuestro tiempo con una extraordinaria colección de esas cartas en las que ellos respaldan a H.P.B. en todo lo escrito por ella, bajo sus órdenes e inspiración y a la vez, como su único agente para la difusión de la Teosofía junto a otros colaboradores y un grupo de Adeptos, como los que dieron impulso a ese plan desde la misma Gran Logia, creando así el Movimiento Teosófico en el mundo, además del porqué se daba a conocer a la Humanidad, El Plan de Evolución, no solo de nuestro planeta, sino también del Kosmo como parte integral de ese Plan evolutivo o Plan Divino.

Como hoy se conoce, la gran tarea que comenzó en ese tiempo en que corría el año 1875 y es fundada La Sociedad Teosófica, ante la iniciativa de H.P.B. y el Coronel Olcott, junto a W. Q. Judge, primero en los EE.UU. de América y luego desde la India, en Adyar para poder extender la Teosofía a toda Europa y desde allí a la totalidad del Mundo. Mas, no fue coronado este gran esfuerzo por ese triunfo necesario que se esperaba por parte de la Humanidad con los arcaicos conocimientos de la Teosofía. Si bien produjo que se atenuara el materialismo, no surgieron del conjunto de Teósofos de ese tiempo, la cantidad de Hombres que llegasen a comprender la importancia de tomar una inteligente distancia de la atracción hipnótica que produce, la vida material, con sus infinitas atracciones y tentaciones, muchos, solo buscaban poder, y la característica postura de la ostentación del pavo real y sus coloridas plumas, para sentirse importante y hasta la soberbia de muchos Hombres que pretendían saber más que estos Santos Varones, por considerar a la India y a sus hijos personas ignorantes y a sus Ciencias Espirituales una superstición. Sin embargo, hubo un solitario e incansable trabajador que pudo lograr ese objetivo sagrado dentro de la S. Teosófica y por ello, pudo reunirse finalmente con su Maestro y se llama Damodar K. Mavalankar. Las ciencias del Espíritu más importantes se desarrollaron en ese país, la India, cuna de la mayor parte de las religiones dominantes de ese tiempo y del actual. El materialismo con todos sus vicios abarcaba el corazón del hombre y ocultó su misión en la vida, y más que nada su origen divino. Desde La Gran Logia, se preparó un Plan para evitar que la franja de ese ancho abismo se siga extendiendo amenazando con separar cada vez más al ser Humano de sus intereses Divinos, alertándolo, del porqué de su presencia en este mundo, sus comienzos dentro de este plan de evolución y su fin posible dentro de él.

Estos Maestros de la Sabiduría de todos los Tiempos, revelaron al mundo parte de todas esas Ciencias que por un largo ciclo no fue posible brindárselas. Legaron a través de H.P.B. informaciones sobre los procesos con los cuales Karma da impulso a cada nuevo ciclo para que esa fuerza, con todas sus miríadas de vidas en evolución, pueda seguir ascendiendo peldaño a peldaño, según el Plan establecido por la misteriosa ideación Kósmica, la cual da origen a todo lo manifestado en diversidad de formas y de vida.

Los Maestros de Sabiduría Arcaica, son los custodios verdaderos de esa Ciencia que ha hecho de ellos Súper-Hombres, teniendo la capacidad de funcionar como los seres Humanos que son, en el plano físico y actuar en los estados supremos de conciencia como Adeptos, sus abnegadas obras por el bien de la Humanidad los ha sumido en el Sacrificio de renunciación más sublime, convirtiéndoles en los guardianes del progreso espiritual de todo ser vivo que se manifiesta en este sistema. La Humanidad de la que ellos hablan no está circunscrita solamente al Hombre, la Humanidad, para ellos es toda vida senciente que puja por ganar su lugar en el concierto Kósmico de la Evolución, la más pequeña partícula de vida, es tan importante, como lo es el Espíritu Planetario más elevado, entre estos dos tipos de vidas, solo media como diferencia, lo que se ha conquistado, en materia de evolución, el esfuerzo de esa partícula seguramente la llevará a llegar a ser un Espíritu Planetario porque en ella, existen todos los contenidos Espirituales en estado embrionario, prestos a desarrollarse en el momento en que la fuerza del ciclo Kármico le signe esa oportunidad.

Los Mahatmas revelaron a través de su agente, H.P.B., que el culto a los muertos es una aberración producto de un grave mal entendido sobre la ciencia de la reencarnación, y que este error fatal para la Humanidad, llamado espiritismo, los desviaba a un mundo tenebroso, creando un Karma adicional para sus practicantes tanto en el plano físico como en el Astral-Kámico, donde las entidades desencarnadas pueden ser atraídas por esos médiums produciendo un fatal enlace, por su apego a la vida física y su maldad. Sugerimos la lectura y estudio de la Carta nº 16, donde el Mahatma K.H. explica minuciosamente los peligros del mediumnismo, como polos de atracción de personas desencarnadas, llevándolas hacia un Karma de consecuencias imprevisibles, no solo para el desencarnado, si no para el mismo médium que queda ligado indisolublemente al Karma del Muerto.

Los Mahatmas revelaron que esos médiums, solo alcanzan el mundo más bajo de la naturaleza, el cual solo puede contener los residuos de esas Almas que los habitaron y luego al morir para este mundo, fueron abandonados y comenzaron su descomposición, mientras que, las Almas que los desecharon, siguen su ascendente proceso espiritual lejos de ese obscuro mundo de muerte.

La necesidad mística de algunas personas, entre ellas algunos con cierto desarrollo psíquico, han tomado a los Mahatmas con un sentido totalmente religioso, nada más lejos de esto, la ignorancia cobra víctimas a cada momento y es así como muchos pueden llegar a creer esas inexactitudes, que se dicen de ellos. Tampoco es verdad que los Mahatmas necesitan de emisarios tomados al azar dentro de la sociedad Humana, para dar algún tipo de enseñanza o mensaje y menos a través de médiums dado que los Instructores han enseñado el peligro de estas prácticas, por lo tanto nada más que leer en sus cartas dirigidas a A. P. Sinnett para darse cuenta de la opinión que ellos tienen de las comunicaciones con los muertos. Actualmente existen programas en Televisión, en los cuales parece hasta divertido la interacción con fantasmas de muertos, y lo peor es la intervención de niños que seguramente no terminarán muy bien a causa de las obsesiones y miedos naturales en ellos. Es un costo muy alto el de arriesgar a criaturas por dinero en un terreno aún no muy conocido y donde se compromete seriamente el destino de los mismos; padres sin escrúpulos, deseosos de fama y dinero entregan a sus hijos a prácticas que los pueden llevar tanto a la locura como al suicidio. Por lo tanto ningún médium puede mantener comunicaciones con los Mahatmas y si estos estuviesen muertos estarán seguramente muy lejos del alcance de cualquier ser Humano, tanto de los psíquicos como de médiums que nada tienen que ver con la vida pura y espiritual de esos Adeptos.

“Las Cartas de los Mahatmas a A. P. Sinnett” muestran parte del corolario de sus intervenciones en el Movimiento Teosófico, pero a la vez muestran con nítida claridad sus ideas de cómo ven ellos los graves desvíos de la Humanidad en lo Ético y en lo Moral, dando un panorama pocas veces visto de las normas de conducta de las Religiones que se han convertido en la piedra de discordia en la Humanidad creando divisiones que han hecho desaparecer todo intento de Fraternidad, y arrastrando con sus creencias al crimen a sus devotos seguidores llevados por un fanatismo cruel y despiadado que hace que entre ellos se desconozcan como partes de un Todo Espiritual. La Carta nº 10, ha sido estudiada por muchos estudiantes de Teosofía, y es para reflexionar un largo tiempo y para que toda persona que pretenda colaborar con el bien común, la lea, puesto que, después de hacerlo no es posible quedar indiferente ante tantas verdades. Los Mahatmas con sus enseñanzas, provocan una transformación en nuestro campo mental, nos abren los ojos del Alma, que son los únicos capases de contemplar el Espíritu Divino que realmente somos, y nos muestran esa única Realidad que es la Unidad de Vida, o esa Esencia Divina desde donde todo procede y hacia donde todo retorna.

Son los Chelas, preparados por ellos sus auténticos emisarios, y en estos Chelas, existe un voto de silencio que por ningún motivo les haría revelar su relación espiritual con Adeptos, eso cortaría de inmediato su relación vincular con ellos.

Los Mahatmas no han llegado a su estado de Santidad nada más que para cumplir los deseos de personas egoístas e incapaces de hacer un simple acto de caridad con nadie, los Maestros no abogan ante la Ley que ellos respetan y Aman, por el Hombre que encuentra placer en vivir disociado de ella, ni mucho menos interpelar ante un Dios que decide los destino de las Almas a cara o cruz, porque saben que no es posible encontrar en todo el universo tal tipo de Dios que elige entre sus hijos, entre cielos e infiernos, creando con esa elección una división insalvable para la Fraternidad Universal, y además, donde la compasión brilla por su ausencia, y la Ley de oportunidades es posible engañar tratando de salvar a quien ha infringido sus sagrados mandatos.

Se han creado un sin fin de especulaciones respecto de los Mahatmas, y aparecen literaturas con personajes que dicen mantener contacto con estos Hermanos Mayores y nada más leer esos supuestos mensajes para advertir que son tan falsos e insustanciales como sus enfermas imaginaciones, decir que se comunican con los Mahatmas y escribir mensajes en sus nombres, y además enseñanzas que por mejores intenciones, son a las claras un desvío, es contribuir con más ignorancia y llenar el campo mental y colectivo de la Humanidad con un pesado Karma, que traerá más obscuración, porque la mentira no es precisamente un haz de Luz de la Verdad.

Las comunicaciones con estos Adeptos son reveladas por H.P.B. cuando comienza la fundación de la S.T. pero, estas comunicaciones, no eran nuevas al momento en que ella las reveló, pues los Mahatmas revelan en sus cartas, que encontrar un Vehículo europeo para tamaña empresa, fue posible después de un infructuoso tiempo en que ellos buscaron en toda la Humanidad quien reuniera las condiciones evolutivas que le permitiera soportar las enormes tensiones producto de la ceguera mental de toda una Humanidad descreída y sometida por la ignorancia. Un individuo, que impulsado por sus elevadas convicciones y una fidelidad absoluta a sus instructores, y un inquebrantable Amor por la verdad, pudiera llevar adelante esa difícil misión, eso fue lo que encontraron ellos en H.P.B. después de una búsqueda que tardó más de un siglo ¿es posible creer que después de H.P.B. surgieran tantos "contactados" por los Mahatmas queriendo incluso sobrepasar las capacidades de esta brillante mujer? Encontrar en la raza Humana seres que logren enfrentar semejantes infortunios y riesgosos desafíos, además del trabajo full-time, nunca es una tarea fácil como lo demuestran los Mahatmas al decir de sus cartas. Hasta el día de hoy no ha aparecido en la sociedad Humana nadie que pueda emular la extraordinaria personalidad de H.P.B. y sus facultades mentales para traer del pasado semejante cantidad de conocimientos que llegaron a ser admirados por hombres de ciencia como A. Einstein cuando observó que esta mujer hablaba de la división del átomo ad-infinitum, en “La Doctrina Secreta”, cuando esto era para esa época una imposibilidad para la mayor parte de los científicos.

Tal vez, quienes escriben esos supuestos mensajes, creen que los Mahatmas no existen y por ello nadie vendrá a contradecirles ni a reclamarles, pero en la Biblioteca del Museo de Londres es posible encontrar las cartas con las cuales Trevor Barker compiló el libro “Las Cartas de los Mahatmas a A. P. Sinett”. Este libro no lo escribió él, ni fue un invento de su imaginación, allí en Londres, están las auténticas cartas preservadas en volúmenes, que son una herencia legítima de la Humanidad, las cuales él copia y forma el libro. Al poder verlas y comprobar que entre ellas se encuentran varias que fueron precipitadas y hoy son un enigma para la ciencia que las investigó, producen una admiración mayor. La contribución de Trevor Barker tiene un inestimable valor, gracias a su empeñosa tarea, hoy podemos saber de la existencia real de estos Benditos Hombres, sus cartas son el testimonio vivo de ello. Estas cartas echan por tierra toda pretensión de los que escriben y se dicen así mismos los “contactados” y que reciben instrucciones para darla a otros junto a mensajes fraudulentos en sus nombres.

Estar frente a estas cartas, conmueve el Alma, todas ellas con sus contenidos de profunda Sabiduría nos demuestran la gigantesca estatura Espiritual de estos Sabios y al comparar con las supuestas cartas de literaturas fraudulentas, no es posible evitar la vergüenza ajena que se siente y una profunda tristeza mezclada con una más grande impotencia. Nada parece impedir que figuras tan importantes, sean denigradas, a la condición más baja de las pasiones Humanas y a la categoría de Santos mediadores a través de los cuales es posible pactar con un supuesto Dios, para obtener beneficios o los favores más obscuros.

Cuando H.P.B. nos enseña a través de sus escritos, sobre el Chelado, vemos como, quien convoca al Maestro para ser su discípulo, es dejado solo para que desarrolle todas sus capacidades, de templanza, abstinencias, caridad y servicio, no hay un Maestro “contactándose” con él todos los días; es puesto a prueba y observado para ver su desarrollo, y cuando el pretendido discípulo está listo es aceptado por ese Maestro que eligió su corazón, pero ni aún en ese momento es posible que lo vea, sus comunicaciones están sujetas esporádicamente con algún Chela más avanzado, el cual sí puede estar en contacto con ese Instructor. Y también puede suceder que, llegue a viejo con todos sus méritos y jamás vea a su Maestro, en la presente vida, porque esta es la mayor prueba para el Chela, así es como desarrolla un verdadero anhelo y un sólido vínculo de Amor Espiritual con él. Tal vez en futuras vidas es posible que se encuentre con su Maestro, pero nunca es posible afirmar esto, como negar lo otro.

La angustiosa situación por la que está pasando la Humanidad, y la ausencia de verdaderos guías Espirituales o vidas ejemplares a quien seguir, son un caldo de cultivo para que de él, emerjan personas sin escrúpulos creando organizaciones que pretenden estar bajo la inspiración de algún mal llamado “Maestro Ascendido”, término acuñado por esas personas que al emplearlo queda de inmediato al descubierto que poco o nada saben de lo que es, ser un Maestro.

Muchos de estos rebuscados términos, nada tienen que ver con la verdadera Gran Logia Blanca, ¿saben las personas que los usan a qué se refieren dando a los Maestros ese “titulo”?

Según H.P.B. existen varios niveles de Chelado, y es así como un Chela avanzado puede ser el Maestro de uno menos avanzado, de lo cual surge como resultado de este conocimiento que un Maestro fácilmente puede ser el Chela de otro más avanzado. Pero la excepción que hubo en tiempos de H.P.B., fue que se adoptó el nombre de “Chela Laico” para todos aquellos que por estar bajo ciertas circunstancias, como ser el estar casados, y que quisieran probarse a sí mismos, tuvieran esa oportunidad. Seguramente que al lograr cierto avance en el Chelado Laico, queden sembrados esos Skandhas que darán a la futura personalidad una nueva oportunidad, pero quizá, en un Chelado más comprometido que en uno Laico.

Pero es oportuno dejar expresarse a uno de estos Maestros, diciendo, “Dejamos que nuestros Chelas sean temporalmente engañados, para suministrarles los medios de que nunca más sean engañados en adelante, y de que vean toda la maldad de la falsedad y la mentira, no solo en esta, si no en muchas de sus vidas posteriores… con el único objeto de hacer brotar toda la naturaleza interna del Chela, la mayoría de cuyos recodos y aristas permanecerían oscuros y escondidos por siempre, si no se les diera la oportunidad de poner a prueba cada uno de esos rincones a su turno. Que el Chela gane o pierda el galardón, depende enteramente de él mismo. La opción de recibirlo o no como Chela pertenece al Chohan.” (Carta N° 30)

¿Cuánto hay de posible en que todos los “contactados” hayan pasado esas delicadas pruebas, para ser legítimos agentes o mensajeros de estos Adeptos?

Es verdad que el mundo está lleno de buenas intenciones, pero para nuestro progreso Espiritual, no significan nada si no están acompañadas con acciones nobles, las buenas intenciones sin acciones empobrecen el Alma, creando un mundo ficticio y enfermo de egoísmos.

Los Mahatmas advierten diciendo, “debéis venir de vuestro mundo al nuestro”, para lo cual se debe atraer al Maestro con una vida pura, es la única manera, y una vida pura requiere de un arduo entrenamiento donde nuestras pasiones y apegos, deben ser sometidos a una voluntad superior, transformándolos en altos propósitos para servir incondicionalmente a toda la Humanidad. Valor, es otras de las cosas que ellos le piden a sus Chelas, para soportar la tenaz lucha de la ignorancia por mantener su reinado.

Entonces, podemos ver varias de las dificultades que existen para poder auto-nombrarse Agente de estos Maestros, a la luz de más informaciones que la Teosofía posee, es fácil poder deducir la verdad sobre qué son en realidad estos Maestros y como poder acercarse a ellos.

En muchas de sus cartas, los Mahatmas revelan mucho sobre las Reglas de Oro de su Conducta, muchas de ellas no es aún posible conocerlas, ni siquiera podríamos comprenderlas, ya que para poder hacerlo, deberíamos alcanzar peldaño a peldaño esa Intuición Superior que nos permitiría interpretarlas.

Expondremos algunas partes de sus Cartas, y quizá, si agudizamos nuestra plena atención, podamos intuir esa profundidad Espiritual que sub-yase en cada frase tratando de que sea vista y oída por nuestra Individualidad, a través de nuestra personalidad, la cual debe desembarazarse de las estructuras mentales y ser tan flexible y permeable a las enseñanzas que estos Grandes Hombres nos han dejado en sus Cartas, tratando que con ellas, podamos domar nuestra naturaleza instintiva y alcanzar nuestra verdadera Naturaleza Intuitiva.

“La ignorancia crea dioses y la astucia aprovecha la oportunidad.” (Carta N° 10)

“Nosotros hemos de librar nuestras propias batallas, y el conocido dicho de que “el Adepto se hace, no nace” es rigurosamente cierto. Puesto que cada uno de nosotros es el creador y productor de las causas que conducen a estos o aquellos resultados, no tenemos más que cosechar lo que hemos sembrado. Nuestros Chelas son ayudados sólo cuando son inocentes de las causas que les crean dificultades, cuando esas causas son generadas por influencias ajenas y externas. La vida y la lucha por el Adeptado serían demasiado fáciles si todos tuviéramos detrás de nosotros limpiadores que barriesen los efectos que hemos generado por nuestra propia imprudencia y nuestra presunción. Antes de que se permita, a los Chelas, dedicarse al mundo, se los dota a todos de poderes más o menos clarividentes y con excepción de esa facultad, que si no fuera frenada y controlada tal vez les conduciría a divulgar ciertos secretos que no deben ser revelados; se les deja en pleno uso de sus poderes, cualquiera que estos sean. ¿Porque no los usan? Así paso a paso y después de una serie de penalidades, el Chela aprende, por amarga experiencia propia, a reprimir y a guiar sus impulsos, pierde su temeraria impetuosidad, su propia presunción y nunca vuelve a caer en los mismos errores.” (Carta N° 54)

“Sin embargo se le dijo a Ud. que el Sendero que conduce a las Ciencias Ocultas ha de ser hollado laboriosamente y cruzado con peligro de la vida; que cada nuevo paso en él, conducente a la meta final, está rodeado de peligros y crueles espinos; que al peregrino que se aventure en él, primero se le hace enfrentar y conquistar las mil y una furias que acechan en sus portales y entradas inviolables, furias llamadas, Dudas, Escepticismo, Escarnio, Ridículo, Envidia, y finalmente, Tentación, especialmente esta última, y que aquel que ha de ver más allá antes tiene que destruir esa viviente muralla; que debe poseer un corazón y un Alma revestidos de acero y una determinación férrea que nunca ceja, pero que a pesar de todo eso, debe ser benigno, humilde, benévolo y haber extinguido en su corazón toda pasión humana que conduzca al mal.” (Carta N° 62)

“Nuestras Ideas sobre el Mal. El Mal no tiene existencia per se, no es más que la ausencia del Bien, y existe sólo para aquel que se transforma en su víctima. Procede de dos causas y como el Bien, no es una causa independiente en la Naturaleza. La Naturaleza carece de bondad o de maldad, ella sigue solamente Leyes inmutables tanto cuando prodiga vida y alegría, como cuando envía sufrimiento y muerte y destruye lo que ha creado. La Naturaleza tiene un antídoto para cada veneno y sus Leyes una recompensa para cada sufrimiento.” (Carta N° 10)

H. P. Blavatsky y su conocimiento sobre los Mahatmas;

“Un Mahatma es un personaje que mediante una preparación y educación especiales ha desarrollado aquellas facultades superiores y ha alcanzado aquel conocimiento Espiritual que, la humanidad común, adquirirá después de pasar a través de innumerables series de reencarnaciones durante el proceso de evolución Cósmica, siempre que, como es natural, no vaya durante ellas en contra de los fines de la Naturaleza y cause su propia aniquilación.” 

“Nuestros Maestros, no son “dioses celosos”, son simplemente mortales sagrados, empero, superiores a cualquier mortal de este mundo, moral, intelectualmente considerados. A pesar de su santidad y de su adelanto en la Ciencia de los Misterios, son, sin embargo hombres, miembros de una fraternidad, en la que son los primeros en observar sus correspondientes Leyes y Reglamentos. Y una de las primeras Reglas, exige que aquellos que inician su viaje hacia Oriente, como candidatos, para ser observados y recibir los favores de los custodios de esos Misterios, deben marchar por el camino recto, sin detenerse en los desvíos y senderos laterales tratando de unirse a otros “Maestros” y profesores que con frecuencia pertenecen a la ciencia Siniestra, para que adquieran confianza y muestren fe y paciencia, además de otras condiciones que deben llenar.” (Los Mahatmas Teosóficos – H. P. Blavatsky)

De W. Q. Judge;

“En toda edad y en la historia de las naciones, se les ha dado a estos Hombres de gran poderío y compasión, distintas designaciones. Ellos han sido llamados Iniciados, Adeptos, Magos, Hierofantes, Reyes del Oriente, Sabios, Hermanos, y varios otros nombres. Pero en el idioma Sanscrito hay una palabra que cuando se la aplica a ellos, inmediata y completamente los identifica con la Humanidad. Este nombre es el de Mahatma. Esta palabra se compone de Maha-gran y Atma = Alma, y por lo tanto significa Gran Alma; y puesto que todos los Hombres poseen Alma, lo que distingue al Mahatma, es su Grandeza.” (El Océano de la Teosofía – W. Q. Judge)

Creemos que este extenso artículo puede y debe derramar un poco de luz sobre cómo es posible alcanzar a través del Chelado, el Adeptado. Pero a la vez, es necesario evitar que alrededor de estos Hombres Sagrados se puedan crear confusiones, y mezclarlos con ideas religiosas permitiendo con ello fomentar una superstición mayor. Un Mahatma se hace así mismo, disolviendo todas las capas de ese barniz contraído en el mundo material que lo ha mantenido prisionero durante edades, si bien en el campo de la evolución no es posible avanzar dando saltos, lo que sí es posible es acelerar los procesos evolutivos con técnicas y disciplinas desarrolladas y custodiadas por los Mahatmas de ciclos anteriores, cuyos secretos son actualmente custodiados por los que han logrado esa superación espiritual en este presente ciclo, esos conocimientos basados en investigaciones que llevaron miles de años, hoy son llamadas también Ciencias Ocultas, y solo son reveladas a aquellos valientes de corazón y mente, que se entregan al Servicio Espiritual de toda la Humanidad, lo cual no es una tarea fácil, siendo El Sendero de difícil ascenso y tan escarpado que el intentador debe lograr mantener un equilibrio constante y una plena atención para no caer bajo el influjo de ningún engaño. Todo lo que se ha podido decir aquí, debe alertar a todos los estudiantes de Teosofía, sobre toda esa literatura que presenta El Sendero como una cosa facilista y que es posible obtener logros verdaderos en dos o tres meses, pagando por cursos y libros que son un insulto para las Sagradas Doctrinas, acuñadas por esos Hombres Santos en una larga  sucesión de ciclos. Y para todos aquellos que han oído sobre los Maestros y no han estudiado Teosofía, podrán verse beneficiados con este artículo e ir a las fuentes para evitar caer bajo cualquier engaño orquestado por personas inescrupulosas y que han hecho de sus mentiras un negocio floreciente, apoyados con libros hechos por ellos mismos y atribuido a mensajes dados por los Mahatmas. Quiera la buena Ley, que con escritos como estos, se pueda evitar el mal uso del nombre de los Mahatmas y a la vez desterrar toda posibilidad de cualquier tipo de superstición, que pueda afectar engañosamente a toda la sociedad Humana.

Por Manuel Fernández

Junio del 2014

 

 

 


 

Literatura relacionada:

Diálogos Teosóficos - Segunda Parte (continuación II)

 

Interlocutor: ¿Hay en Teosofía libros que traten más sobre este tema que nos ocupa?

Estudiante: Si, por supuesto que los hay pero quizá expuesto de diferente manera, pero diciendo exactamente lo mismo y hasta más claro; cuando me referí a Teósofos que no exponían este tema lo hice por algunos pocos de los actuales, no así de los más grandes y reconocidos que de diversas maneras lo han hecho. Le sugiero ponga especial atención en la parte de la pregunta anterior, marcada con el n° (1) y la respuesta marcada igualmente donde revela lo siguiente “El llamado interno es ese impulso moral que parte de ese punto donde Buddhi-Manas o Buddhi y la mente superior, se fusionan, proyectando sobre la personalidad su influencia bienhechora”. Pero esto va más allá todavía maravillosamente explicado en “LAVOZDEL SILENCIO” de H.P.B. Debemos agregar además, hay varias cosas que se deben reunir para producir este sagrado evento, entre ellas, en una existencia física, madurez Kármica y un esfuerzo voluntarioso desde la misma personalidad que comienza a poner sus oídos y su corazón en dirección hacia esa “Voz de su Sí Interno”, los contenidos que han estado dominando por edades las reencarnaciones, no pueden detener ese impulso lleno de fuerza espiritual, a no ser que esa personalidad se deje convencer por sus debilidades, entonces estará todo perdido y habrá que esperar otros ciclos más favorables. Para inspirarse espiritualmente en propósitos relacionados con ese impuso moral, lo que recomiendo que, aunque no se tenga toda la comprensión sobre el contenido de “LA VOZ DEL SILENCIO”, siempre leer sus sublimes enseñanzas, calarán seguramente en nuestras debilidades para derrotarlas y podremos recibir así la fuerza silenciosa de esa “Voz”, a la que se refiere H.P.B.

Interlocutor: Ud. hace alusión constantemente a la Ley de Karma, ¿podría ampliar más la información sobre la misma?

Estudiante: En la literatura Teosófica encontrarán muchísima información sobre esta misteriosa Ley. H.P. Blavatsky en La Doctrina Secreta, La Clave de La Teosofía y William Q. Judge en varias de sus obras, como en las mismas Cartas de los Mahatmas a A.P. Sinnett, y otros autores de la Teosofía Original, dan una gran cantidad de información importantísima sobre este primer peldaño, y los tres siguientes, reencarnación, el septenario del hombre y el plan divino o de evolución, de los cuales, el primero, Karma, está íntimamente relacionado con todos ellos. Es en estos cuatro peldaños que se desarrolla toda la evolución.

Interlocutor: ¿Karma está entonces íntimamente ligado a la vida del hombre?

Estudiante: No solo a la vida del hombre, sino a todo el Universo en su conjunto, desde cuando este último comienza con su manifestación periódica, ya Karma está en actividad. Es esta la ley que produce el equilibrio de cuanto cuerpo celeste se puede ver en el firmamento, y a la vez, es la ley moral en la conducta del hombre, siendo el hombre la única criatura que produce desarmonías, convocando a Karma con ello y convirtiéndose en víctima de esta ley que ajusta toda desarmonía a la Armonía Universal.

Interlocutor: ¿Karma siempre ha sido conocido bajo ese nombre y a la vez como una ley armónica?

Estudiante: En realidad la palabra Karma comenzó a ser conocida en Occidente, a través de la difusión de la Teosofía y por sus escritores, el término “Kármico” también fue acuñado por un escritor de Teosofía, pero además de Divina Providencia, Némesis, Justicia Divina y aún Destino, la ley de Karma juega un papel preponderante en el desarrollo de la evolución, y aquí debo decir que esta ley opera en todos esos planos septenarios de la naturaleza y en cada uno de acuerdo a la modalidad de cada plano y por lo consiguiente en nuestro plano físico, siempre como ley de armonía-equilibrio, pero donde existe una inteligencia operante, rige como ley moral como en el caso del hombre. Además muchos confunden a Karma como destino y esto no es así, en todo caso el hombre tiene un destino Kármico que cumplir.

Interlocutor: En el proceso de evolución, ¿Existe la posibilidad que la individualidad se identifique de manera exagerada con la materia? ¿Qué consecuencias traería esto?

Estudiante: En el proceso de evolución, la individualidad realiza su experiencia sumergiéndose cada vez más en la materia buscando el punto de equilibrio y cierto grado de perfección que le permita su ascenso hacia la espiritualidad, o sea, a esa suprema perfección. Todo esto bajo procesos regidos por la ley de Karma y sus variados Ciclos. Estos Ciclos de grandes extensiones de tiempos son los componentes del Plan de evolución, impulsando a miríadas de Mónadas que evolucionan en ellos.

El identificarse plenamente con el materialismo cuando el punto de nuestra evolución indica que debemos desapegarnos de él, nos puede separar y alejar de ese derecho ganado con tanto esfuerzo. Se puede perder esa armonía con las condiciones Kármicas que se presentan Cíclicamente como más favorables y como último resultado las consecuencias pueden provocar el perder la oportunidad de trascender la etapa Humana de ese Ciclo en que debiera realizarse.

Interlocutor: ¿Qué tiene que ver Karma con los desastres naturales que suelen afectar los continentes y por ende a toda criatura que vive en ellos, costando tantas vidas? ¿Acaso se debe a estos Ciclos o son meras casualidades?

Estudiante: Hay algo que aún no mencionamos con respecto de Karma, y es su Ley de Ciclos, por eso es que nos referimos constantemente a ellos en la literatura teosófica, lo que con ello se puede demostrar es que no hay casualidades sino ley operante. Estos eventos ocurren infaltable y periódicamente en distintas partes de nuestro globo terrestre, son eventos que ocurren con precisión de tiempo, los mismos traen cambios sustanciales en la geografía del planeta como también en la conducta humana. Las traumáticas experiencias en esos procesos si bien afectan la psicología de los damnificados producen un nuevo giro en el impulso siempre ascendente y espiral de la evolución. Pero también hay desastres que se pueden precipitar en sistemas tan delicados como este planeta, todos debidos a la inconducta humana, que lógicamente sufrirá las consecuencias.

Interlocutor: ¿Ud. cree que los actuales acontecimientos de desastres llamados naturales en nuestro planeta son causados por la acción del hombre?

Estudiante: Esto es más que evidente, ese es el Karma convocado por la irresponsabilidad de una humanidad ambiciosa, donde el delicado equilibrio del sistema es agredido y desbastado, donde los ríos, lagos y mares sufren el envenenamiento junto a sus especies por la acción de sacar de sus entrañas elementos que se consideran de valor y riqueza, para una vida tan pasajera y efímera como lo es el ciclo de existencia humana. Debería servir de advertencia a los llamados “poderosos” de la raza humana, todo lo que está ocurriendo en sus países, además del caos que han desatado en este delicado y pequeño sistema, por lo que están convirtiendo al Planeta, en un futuro Marte. Todo por sus descabelladas ambiciones, deben recordar que ellos también viven en él y además, suyo será el fatal resultado junto con sus países y sus ciudadanos condenados, por la fuerza de esta ley que no negocia, solo actúa con la misma fuerza y poder con el que fue perturbado el equilibrio del sistema. ¿Acaso, estos “poderosos” no se han dado cuenta que los cañones de Karma los están apuntando y ya comenzaron su poderoso tronar? Y, que no habrá política ni religión ni poder humano que pueda evitar la justicia de este Regente Divino, llamado Karma. Deberían detenerse a tiempo y evitar así su desaparición, como ocurrió con tantas culturas que hicieron oídos sordos a las advertencias de la misma Naturaleza y su Ley.

Interlocutor: Parece ser que la expresión Karma, es mucho más abarcante de lo que cualquier estudiante puede imaginar en un principio. En el artículo titulado “KARMA”, H.P. Blavatsky dice lo siguiente: “[…] La Ley de Karma es una ley moral, y donde no existe responsabilidad moral, no puede haber aplicación de la ley de karma.” En el mismo artículo ella afirma que esta Ley repercute en todos los departamentos de la Naturaleza. Quiero creer que un animal o una planta no tienen responsabilidad moral ¿Podría Ud. aclarar un poco este asunto?

Estudiante: Si, ciertamente Karma es una Ley omniabarcante, con una profundidad insondable para toda comprensión Humana. A esta Ley se la considera plenamente como equilibrante, y en el aspecto Humano como Moral. Es el equilibrio mismo en cualquier parte del universo, manteniendo en perfecta sincronización la constante construcción o destrucción de los sistemas galácticos dentro de la ley cíclica que también depende de él. Karma es la Ley que trae al mismo universo a la vida, por ello se dice que cada manifestación universal es la reencarnación de la anterior, lo que así nos demuestra que han existido otros y otros universos desarrollando evoluciones durante eónicas eternidades y sigue su proceso cíclico en un avance constante, siempre llevando a toda la evolución por una vía de equilibrio que le permita llegar a la perfección.

Como ley moral, opera donde hay un tipo de inteligencia que tenga la capacidad, dentro de su libre albedrío, de afectar el equilibrio de esta ley. Tan pronto como la afectamos por una acción obtenemos una reacción que suele manifestarse de tres maneras diferentes, pronta, intermedia o tardía; pero la ley siempre recupera ese equilibrio que por alguna acción Humana fue afectado. Hay acciones de esta ley que nos pueden afectar en esta existencia y que nosotros no encontremos explicaciones del porqué nos puede suceder tal o cual cosa, como que no merecemos ser víctimas de un determinado asunto doloroso, sin embargo, hay acciones que nuestra anterior personalidad cometió y Karma procede en esta actual vida al equilibrio de aquello que fue alterado por una acción incorrecta. Esta es la acción Moral de la ley de Karma, nada escapa a su poderosa fuerza correctora.

Karma es en todos los estados de conciencia Ley, vale decir que es operativo en todos los principios espirituales por donde la Mónada Humana individualizada atraviesa, buscando en los planos de la materia su experiencia para que ese Sí mayor que la anida sea Consiente de Sí Mismo. Por lo tanto, desde lo sutil más profundo como en los distintos reinos de la naturaleza en la materia, están bajo el imperio de esta Ley y en cada uno, tiene su particular manera de manifestarse, no es lo mismo para el mineral, las plantas, los insectos, bacterias o los animales y el Humano, pues esta Ley difiere en su poder de acción dependiendo de la inteligencia e intelecto o Sabiduría que haya desarrollado la criatura evolucionante.

Interlocutor: ¿Se puede decir algo sobre el funcionamiento de la Ley de Karma en los períodos de disolución absoluta (Pralaya Universal)? ¿Es necesario equilibrar algo en un período de disolución absoluta?

Estudiante: Es en estos casos en que un estudiante de Teosofía debe investigar en toda la literatura disponible, qué sucede en eso que llamamos la disolución del Universo; por lo que hemos encontrado dentro de la literatura Teosófica parece ser que, a pesar de la disolución donde todo parece detenerse, Karma sigue en estado latente, como reuniendo la fuerza necesaria para comenzar a través de un impulso supremo a ser nuevamente la ley equilibrante en la nueva manifestación. Sería muy interesante saber si karma es un aspecto de la voluntad divina porque creo, que tendríamos una idea más amplia de esta Ley que ayuda en la construcción del Kosmos. Desde lo súper atómico a lo molecular, organizando todo esto hasta llegar a sistemas orgánicos compuestos de tanta perfección como lo es la maravilla del cuerpo Humano, como última expresión de todos esos principios que lo habitan, formando así ese Septenario que trataremos en algún momento.

Por Manuel Fernández

Julio del 2013

 

 

Diálogos Teosóficos - Segunda Parte (continuación)

 

Interlocutor: El estudiante, ¿por dónde debería comenzar esa investigación que Ud. sugiere sobre esa Conducta Superior?

Estudiante: Los Maestros de H.P.B. hacen referencia en sus cartas al Buddhismo, como metodología para conocer la raíz de los avanzados males que arrastran a toda la Humanidad por el caudaloso río de la evolución, donde el hombre no tiene ningún control y es arrastrado sin poder erguirse sobre sí mismo y ser dueño absoluto de su evolución. El Buddhismo contiene en sus profundas enseñanzas la llave que abre las puertas de esa conciencia dormida liberándola de la “Cadena de Causación”, la investigación sugerida justamente trata de esto, del Conocimiento-Ciencia del Buddhismo, son las Nidanas, los Skandhas vehículos de Karma que forman nuestra personalidad, donde las fuertes amarras con los atributos de la materia nos mantienen limitados y condenados al eterno reencarnar: nacimiento, vejez y muerte como único futuro que nos presentan las ilusorias cualidades de la materia.

Interlocutor: Pero, el Buddhismo, ¿no es una Religión?

Estudiante: Ciertamente hay una parte de Buddhismo Religioso, pero mucho menos peligroso que otras fanáticas Religiones que han costado incontable cantidad de vidas humanas. El Buddhismo despojado de sus arneses Religiosos es la ciencia pura de la autorrealización, sus Cuatro Nobles Verdades y El Óctuple Sendero, son la corona de la Doctrina de la Conducta Superior. Si damos cumplimiento a estos Sagrados mandamientos del proceder Correcto, conseguiremos erguirnos sobre nuestra propia humanidad para alcanzar ese estado de divinidad, destruyendo esas amarras del sufrimiento y podremos llegar a la “otra orilla” de ese río, a la última y genuina libertad Espiritual, último escalón en la etapa Humana.

Interlocutor: Pero, la Teosofía ¿es Buddhismo ya que lo sugiere en sus enseñanzas?

Estudiante: H.P.B. dejó bien claro esto, la Teosofía no es Buddhismo, a lo que se podría agregar que la Teosofía ha tomado al Buddhismo en sus esotéricas enseñanzas, ya que en ellas se encuentra la síntesis del Conocimiento Superior y eterno de manera ordenada a un grado sumamente elevado y diríamos perfecto, por el Buddha Gautama. Al parecer los Mahatmas han aprendido de esta Sabiduría, la cual los ha llevado al estado actual de perfección en el que se encuentran, por eso es que lo sugieren como una de las principales vías de autorrealización.

Interlocutor: Entre todas estas sugerencias ¿está implícita la meditación?

Estudiante: Reitero, primero es necesaria una profunda investigación de los condicionamientos (nidanas) frutos de la ignorancia, cómo es afectado nuestro septenario, víctima de ésta, produciendo más causas y reencarnaciones dolorosas y como salir de esta cadena interminable, más la mente en sus dos fases, a partir de la cual comenzará la investigación que nos llevará al reconocimiento del doble intelecto, doble inteligencia, instinto, intuición superior, luego reflexión sobre todo lo que se ha venido investigando, finalmente sobrevendrá a la par de toda esa investigación, la meditación. La meditación es la piedra angular de este proceso que va encaminado a esa suprema percepción de nuestra naturaleza superior, hasta finalmente fundirnos en ella. Sí, la meditación produce en el individuo un esclarecimiento mental, una visión clara de esa realidad tan ajena a los intereses del mundo material. Es a través de este ascendente proceso que el Hombre real comienza a emerger y todo el esplendor de su Sabiduría se revela, liberándolo de este campo de dolor y miserias incontables, llamado Samsara por el Buddhismo.

Interlocutor: ¿Es el conocimiento que aporta la Teosofía suficiente para tamaños logros Espirituales?

Estudiante: Tiene que serlo ya que la Teosofía apunta constantemente hacia ese propósito, pero esto no depende solamente de la Sabiduría que contiene la Teosofía sino más bien de la decisión humana. Según reza un aforismo, “Si yo cambio, el mundo cambia”. Cabría agregar que hay una gran parte del conocimiento Divino, que aún no ha sido revelado según H.P.B. Como estudiante de Teosofía, creo que para que sean revelados, dependerá en mucho de la conducta Humana, única responsable de su propio futuro dentro de este sistema. Podemos prever ese futuro observando la conducta actual de esta humanidad que tanto placer parece tener y sentir, al vivir violando las leyes más elementales de la naturaleza. Los estudiantes de Teosofía que nos consideramos serios, tememos por el futuro que parece que se nos escapa de las manos a cada momento. Como un acto desesperado, como cuando al comienzo del movimiento teosófico en el año 1875 dijera de él un Maestro, que era “una empresa desesperada”, así, hoy los Centros hacen un intento para que cualquier ser humano que tenga en su Alma y corazón una pequeña vibración relacionada con el Amor Universal, se integre a las filas del movimiento Teosófico y sea un estudiante serio de Teosofía, un sano investigador de su propia naturaleza Divina y pueda transmitir a través de su noble conducta, las enseñanzas que hayan logrado hacer de él un ser Humano mejor, y así tener la esperanza de que esta Humanidad tendrá futuro a pesar de las adversidades y que logrará sobreponerse por esa Conducta que formará ese puente que la unirá indefectiblemente con su legítima Divinidad.

Interlocutor: Varios autores Teosóficos serios afirman que el estudio del verdadero Ocultismo no solo puede despertar nuestra intuición y percepción más profunda, sino que puede hacer surgir los contenidos más negativos de nuestra personalidad, ¿esto es así? Si la respuesta es afirmativa, ¿podría Ud. explicar cuál sería la actitud que deberíamos adoptar, ya que optamos por esta filosofía de vida impulsados por ese “llamado interno” tratando de cambiar nuestras acciones en nuestra vida actual?

Estudiante: Siempre en que un individuo hace un intento de cambio, sus propios contenidos intentarán lo suyo, los más elevados lo harán hacia lo espiritual y los menos elevados lo harán hacia lo material. El intento de cambio es como una invocación al Karma que hemos acumulado. Este acto voluntario producto de un serio compromiso con nuestro SÍ mayor, hace sobrevenir un enfrentamiento entre los opuestos intereses que luchan dentro de nosotros por mantener el control, los instintos parecen potenciarse y con ello tratan de ahogar el llamado espiritual que pulsa por librarnos de la materia que nos mantiene aprisionados con los apegos y los deseos, productos de la ignorancia. Todo nuestro instinto desarrollado por edades, reencarnación tras reencarnación, se ha potenciado a tal punto que hemos perdido de vista nuestra verdadera procedencia, la cual debemos recuperar. Nuestra libertad significa la muerte de todos esos compuestos relacionado con el plano físico y por supuesto que ellos no quieren morir, pues han venido por edades viviendo a expensas de nuestra ignorancia y grandes sufrimientos. Con respecto a qué actitud deberíamos adoptar, en preguntas anteriores ya nos referimos a las metodologías dadas por la Teosofía y el Buddhismo, pero debería agregar la importancia que tiene el tratar de escuchar ese “llamado interno”.

(1) Interlocutor: ¿Podría Ud. decir a qué se le llama “llamado Interno”? ¿O en definitiva que es el “llamado interno”?

(1) Estudiante: El “llamado interno” no ha sido del todo explicado por algunos Teósofos, pero quizá nos sirva esta explicación, “El llamado interno es el impulso moral que parte de ese punto donde Buddhi-Manas o Buddhi y la mente superior, se fusionan, proyectando sobre la personalidad su influencia bienhechora. Estando el Karma individual lo suficientemente maduro la individualidad comienza su intento de iniciar su ascenso espiritual, entonces, la nueva personalidad recibe ese “impulso moral”, ese rayo, esa vislumbre espiritual, ese despertar que le insta a buscar e investigar, porque comienza a “darse cuenta” que esta no es la verdadera vida. El “impulso moral” y la frase “darse cuenta” están íntimamente ligadas, porque ese “impulso moral” produce, en la personalidad, ese fuerte contacto con ese “darse cuenta”, esto último es “el despertar”, que comienza como quien va saliendo de un aletargo y profundo sueño y a su vez, en nuestra ventana alborea el resplandeciente sol de la mañana, lo que en primera instancia, nos es dificultoso ver a través de la luz, hasta que nos vamos adaptando a ella, pero lo que generalmente descubrimos, a la luz de ese despertar, es el penoso estado en el que nos encontramos, es en esa concientización que uno a uno vamos identificando “los impedimentos” que nos condicionan a permanecer en ese triste estado o vale decir en ese perpetuo renacer. ¿Desesperación, ansiedad e impotencia? Sí, todo sobreviene como consecuencia de ese “despertar”, porque quisiéramos cambiar millones de años de evolución en tan solo un día, o aunque más no sea en una vida. Sin embargo al sondear nuestra conducta vemos claramente esa imposibilidad, ésta, está infestada de vicios milenarios, sin una conducta correcta incorporada totalmente a nuestro ser, no será posible “abrir las sagradas puertas de la verdadera libertad”. La Conducta Superior, escrita con “C” mayúscula, es la única llave, no hay otra, por lo tanto, ha llegado el momento en que debemos comenzar nuestra “adultez evolutiva”, y comenzar nuestro necesario proceso que ha estado esperando mucho tiempo ya, esta importantísima oportunidad, por favor, no la desaprovechemos!!!

Interlocutor: ¿Es posible que una persona que reciba ese “llamado interno” lo desoiga y con ello pierda esa oportunidad de iniciar su ascenso espiritual?

Estudiante: De hecho, esto ocurre más a menudo de lo que cabría imaginar, son lamentables fracasos donde se puede comprobar el enorme poder de esos contenidos internos llamados Skandhas por los Buddhistas, estos también llamados impedimentos contribuyen con esa sordera espiritual, aprovechando la falta de voluntad, debilidad moral, la personalidad se hace procaz en su reincidencia en los vicios que la separan de esa oportunidad, que suele tardar muchas existencias en aparecer porque hay que reunir una importante calidad de Karma positivo para lograr ese tipo de oportunidad, que no siempre es posible reunir, dado que nuestra identificación con la materia, a la cual vemos como una realidad, nos hace, por nuestro apego a ella, reunir más Karma desfavorable en cada existencia y por consiguiente nos alejamos de esa posibilidad de obtener otra oportunidad en un corto lapso de existencias.

Interlocutor: ¿Hay en Teosofía libros que traten más sobre este tema que nos ocupa?

(En la semana del 05 de agosto del 2013 se publicará la continuación de este trabajo)

Por Manuel Fernández

Julio del 2013

 

Diálogos Teosóficos - Segunda Parte

 

Interlocutor: H.P. Blabastky, hace referencia en uno de sus escritos, a la necesidad de poseer “un intelecto despierto” ¿es un impedimento el no poseerlo para avanzar en los estudios de Teosofía?

Estudiante: Creo que esta pregunta puede tener más de una respuesta, pero comenzaremos diciendo lo siguiente; la gran mayoría de las personas utilizan esta capacidad para fines pocos altruistas generalmente, lo cual hace que ese intelecto comience a oscurecer y a desviarse hacia una gran variedad de actividades, todas, profundamente inclinadas a intereses materiales. Pero cuando el intelecto es inducido a asuntos que tengan que ver con el bienestar espiritual de la Humanidad, su actividad se va refinando a medida que ese altruismo lo eleva buscando soluciones que permitan la erradicación de todo lo que causa dolor y miseria por conductas erradas. Un intelecto que despierta, comienza a sentir dentro de sí, esa universal acción benefactora en la medida que esa gran responsabilidad le impulsa a ser un servidor para el bien común y, en la medida que crece, la Luz de un intelecto mayor, va inundando los profundos rincones de una mente que ha estado dormida en el regazo de las pasajeras ilusiones.

Por lo tanto, somos nosotros los que formamos ese impedimento al no enfocar nuestra mente y corazón a labores más altruistas; un intelecto sólo inteligente, no suele ser suficiente, pero un intelecto intuitivo puede ser la llave que abra las puertas de una libertad casi insospechada.

Interlocutor: Pero eso ¿no tiene que ver con la inteligencia?

Estudiante: Tal vez, intelecto e inteligencia van necesariamente de la mano en el campo de la evolución, por lo menos en la humana, por ello es tan necesaria la estimulación de estos dos factores del desarrollo humano a edades tempranas, por personas experimentadas. Pero el intelecto que más ha desarrollado la Humanidad no es al que se refiere H.P.B., nuestro intelecto está más íntimamente aspectado con los instintos, los instintos a la satisfacción y al placer, todo está aspectado con el mundo material en el que vivimos, la ciencia, la tecnología, avanzan solo con ese propósito, el placer de esos instintos a través de los sentidos; conjuntamente una gran inteligencia para lograr estos objetivos se desarrolla con el intelecto y nos va haciendo cada vez más dependientes del mundo material; terminamos siendo esclavos del desarrollo de ese intelecto-inteligencia-ciencia.

Interlocutor: ¿Pero no es necesaria la inteligencia e intelecto para evolucionar?

Estudiante: La inteligencia es elevadamente importante cuando se reviste de Sabiduría, sin este atributo logrado por la experiencia interior, la inteligencia no deja de ser tan solo instintiva y que a la vez desarrolla un intelecto más instintivo aún y estos dos factores pueden ser sumamente refinados como lo demuestran los sofisticados logros de la ciencia física, pero, no hacen trascender al Hombre interno y aquí vamos a lo que H.P.B. posiblemente se haya referido, que es al intelecto superior. Son dos los intelectos que el ser humano en evolución desarrolla, uno lo relaciona con el mundo material y el otro es el Intelecto Espiritual siendo este el más importante porque está íntimamente ligado a la mente superior, mientras que el primero está ligado a la mente inferior y a todos los aspectos instintivos.

“Un intelecto despierto” tal como reza en “Los Escalones de Oro” de H.P.B., es la cualidad más importante a desarrollar una vez que “nos damos cuenta” de esa necesidad lógica, si queremos percibir la naturaleza espiritual que ha permanecido silenciosa e imposibilitada de emerger a consecuencia del poder que han ejercido, por edades, los instintos y ese intelecto desarrollado en la materia. Para despertar ese intelecto superior es necesaria “una vida limpia” y “una percepción espiritual sin velos”, lo que implicaría una vida correcta por una Conducta correcta y ver las cosas tal cual son, con el claro discernimiento de su impermanencia, el intelecto superior percibe la esencia interna de las pasajeras formas, va tomando contacto con esa realidad superior que la visión y los conceptos físicos están imposibilitados de ver, porque circunscriben todo al mundo material, en el cual el engaño, producto de la ignorancia, somete a la personalidad.

Interlocutor: Entonces, ¿“La Doctrina Secreta”, obra cumbre de la literatura Teosófica escrita por H.P.B., puede ser profundamente y mejor interpretada a la luz de un intelecto más elevado?

Estudiante: Sin duda alguna que debe ser así, y es como Ud. dice, “más elevado” y no más inteligente, ya que la inteligencia por sí misma no es Sabiduría, pero también me refiero a esa elevada inteligencia superior que está implícita en ese intelecto.

Interlocutor: ¿Hay estudiantes de Teosofía expertos en el estudio e interpretación de “La Doctrina Secreta”?

Estudiante: Ciertamente se ha dicho de algunos estudiantes que se han auto-intitulado de “expertos” en “La Doctrina Secreta”, a esto debo decir como estudiante que no se ha conocido aún un verdadero experto en todo el conocimiento que posee esta extraordinaria obra, y creo que aun H.P.B. recibió mucho conocimiento de parte de sus Maestros cuando escribió esta obra, sin conocer en su totalidad mucho de lo que le fue dictado; lo que implicaría para ser un “experto” un conocimiento tan basto que superaría quizás a la misma H.P.B., y si Ud. investiga cómo fue escrita esta obra verá que es una verdadera imposibilidad ser un verdadero “experto” en “La Doctrina Secreta”.

Interlocutor: ¿es entonces importante tener esa capacidad intelectual llamada “intelecto superior” para comprender lo escrito por H.P.B. en “La Doctrina Secreta”?

Estudiante: Por supuesto que quien posea ese tipo de intelecto comprenderá mejor lo que H.P.B. expuso en “La Doctrina Secreta”, pero H.P.B. y sus instructores dejaron todo lo escrito sobre la Sabiduría Arcaica para toda la humanidad, de manera que cada intelecto e inteligencia humana pueda entender y comprender según sus capacidades, nunca fue elitista la intención de ellos, lo cual crearía una situación separatista entre los estudiantes, y eso está lejos de hacerse por seres que fomentan la Fraterna unión entre la Hermandad de la Humanidad. W.Q. Judge en su “El Océano de la Teosofía” nos da un ejemplo hermoso sobre las capacidades de entender la Teosofía, comparándola a un Océano en el cual, cada uno penetra hasta donde sus habilidades se lo permitan, unos a la orilla, otros nadando a cierta profundidad y otros buceando en lo insondable de ese Océano de Sabiduría.

Interlocutor: ¿Hay algo más que se pueda decir sobre el intelecto ya sea el correspondiente al llamado “inferior” o al “superior”?

Estudiante: Sí que hay mucho más para decir, pero, creo que hay más que se debería investigar, pues existe una correlación que se podría describir de la siguiente manera; intelecto instintivo, inteligencia instintiva, intelecto superior, inteligencia superior, evolución del instinto hasta llegar a ser intuición, cualidades y herramientas de la mente, todo = Sabiduría.

Interlocutor: ¿Será acaso que algún estudiante confunda su inteligencia e intelecto físico con el más elevado, o sea el espiritual?

Estudiante: Es muy probable que sea así, y cuando esto ocurre se puede observar en el estudiante esa capacidad intelectual que deslumbra por sus deducciones y comparaciones, cuando no, por su habilidad imaginativa y pretenciosa de llenar con explicaciones los “huecos” dejados a propósito por quienes han escrito semejante Sabiduría, mas, lejos está el intelecto del estudiante deslumbrado por su propia vanidad de llegar a las alturas de ese intelecto al que se refieren nuestros grandes antecesores, pagados de sí mismos, estos estudiantes, confunden la gordura de la Sabiduría con la hinchazón del vanidoso intelecto inferior.

Interlocutor: ¿Entonces es muy posible caer en el error, confundido el estudiante por ese intelecto aspectado con el mundo material?

Estudiante: Siempre han sucedido casos como estos y aún ocurren, y quizás seguirán sucediendo mientras la ignorancia no sea desterrada por esa sabia voluntad de cambiar, por el bien universal. Muchos han caído víctimas de ese intelecto que ha potenciado el orgullo del gigantesco pigmeo de nuestro yo inferior. Es fácil reconocer al impostor de cualidades tan elevadas, discútale algo que él afirme y no se hará esperar su violenta reacción, la humildad no estará seguramente entre las cualidades de su intelecto, circunscripto al plano material, siendo siempre lo opuesto de quien tiene ese intelecto superior. Hay una notable diferencia del que posee ese brillante intelecto y Sabiduría espiritual, la serena mansedumbre de quien lo atesora se hará notar, siempre enseñará con el más claro ejemplo, para que podamos aprender de sus Sagrados Conocimientos, su nota tónica será siempre la armonía, la comprensión, la compasión y la tolerancia por nuestra ignorancia, jamás una ironía herirá nuestra sensibilidad por no saber, ni humillará con sus palabras a ningún hermano, ni calificará con epítetos al que vea y sepa de sus limitaciones.

Interlocutor: ¿Entonces el investigador debe saber antes de cualquier intento de cambio sobre estas cualidades llamadas intelecto superior e inferior para evitar confundirse en la medida que vaya adelantando en su propio sendero?

Estudiante: Personalmente veo necesario saberlo, es por eso que en los Centros se enseña de la importancia que tiene el estudiar por lo menos por uno o dos años, todo lo referente a la Conducta superior, si es que Ud. realmente pretende producir un cambio genuino en su personalidad, o por lo menos dejar impreso en sus Skandhas (tendencias) ese intento para que, con la anuencia de Karma, pueda Ud. proseguir con ese intento en otra existencia.

Interlocutor: El estudiante, ¿por dónde debería comenzar esa investigación que Ud. sugiere sobre esa Conducta Superior?

(En la semana del 29 de julio del 2013 se publicará la continuación de este trabajo)

Por Manuel Fernández

Julio del 2013